viernes, febrero 12, 2010

Retrato del exartista adulto


Ayer videé el documental sobre la reunión de los Pixies, loudQUIETloud (una metáfora, por cierto, que tardé en pillar en toda su extensión). Creo que es una de las cosas más tristes que he visto nunca. Es la historia de cuatro personas des-estructuradas, dis-funcionales, in-seguras, a-comunicativas y otros muchos adjetivos con prefijos de negación. Es la historia de las miserias de la madurez desde la perspectiva de quien ha tenido una juventud excitante y hermosa. Me hizo comprender esa extraña y monótona energía que desprendían en el Festimad de 2004, una ola de melancolía en lugar de una ola de mutilación. Es una película valiente, con un score que no es ni de ellos, sino una música crepuscular de slides con eco y trenes descarrilados de Daniel Lanois.

Si hay dudas sobre el sentido de esa reunión, quedan disipadas con la versión lenta de Wave que hicieron en la gira. Y por volver a ver a Kim.

PD: se podrá decir lo que se quiera de U2, pero se llevaban de teloneros a los Ramones y a los Pixies.